No me gustaría continuar con mi blog, sin antes dedicarte unas palabras.
Cuando un amigo se va, algo se muere en el alma!
Nos conocimos hará unos 13 años, yo era una niña, y tú un hombretón, guapo, charming, elegante, un caballero, un dandy, conocido, rubio, deportista reconocido y un súper aventurero al que le gustaba vivir la vida a tope. Siempre has sido así. Una sonrisa, una noble mirada, un corazón gigante.
A partir de ese momento, que empezó por un trabajo en común, me acuerdo cuando elegíamos los modelitos de ropa para ponerte en los eventos que yo organizaba y a los que tu siempre asistías! ¡que risas nos pegábamos!.. entablamos una amistad y siempre hemos ido hablando y viéndonos, a veces más, a veces menos, a veces casi a diario en el gimnasio, como este último año!
Siempre un galán con tu enorme sonrisa, tu carita de niño travieso y tu inagotable energía.
Un buen día se me ocurrió la gran idea de emprender mi proyecto, mi nuevo blog de entrevistas a personas interesantes. Tu estabas en mi lista de personas a entrevistar, de los primeros, ya que eras mi amigo pensé que me dirías que si. Y así fue, hablamos, te comenté mi proyecto y me animaste con tu fuerza, – ¡Claro que si hada madrina!, como me llamabas estos últimos años, – ¿Cuándo cenamos?
Cenamos y te hice una entrevista maravillosa. Que risas, que divertido, que bien lo pasamos y como ¡¡me tomaste el pelo!!
Cuando me conociste me retaste a volar contigo, acepté y lo hacías casi cada día que nos veíamos! ¿Qué? ¿Te animas? Vaaa valienteee – me decías – y me volviste a retar en la entrevista, muy formalmente y para que quedase escrito y no me pudiese echar atrás.
Así lo hicimos. Empezamos a planificar las fechas. Tu me decías, – cuando estés preparada me avisas y saltamos, te encantará, pero de este verano no pasa, eh?
Decidimos que cuando volvieses de Sud Ãfrica saltábamos. Lo organizaste todo y volé. Volamos juntos el 17 de Agosto.
Fue uno de los mejores días de mi vida. Gracias Álvaro por la maravillosa experiencia, por todos estos años, las risas, las conversaciones, por tu amistad, tu manera de ver la vida y tus consejos (sí! hago mucho más ejercicio y no, no he dejado de fumar, ya lo sabes!)
Sólo unos días más tarde, me enteré de que habías emprendido el vuelo más largo y alto de tu vida!
Escribo y entre lágrimas sólo puedo decir GRACIAS, GRACIAS POR ESTAR AHÃ. Te echaremos mucho de menos. Es increíble ver los comentarios de tus amigos, conocidos, seguidores, fans! están llenos de amor, que definitivamente, es lo que tu desprendías.
El consuelo lo encuentro pensando en que te has ido haciendo lo que mas te gustaba y pensando que has vivido al máximo, disfrutando de cada minuto, de cada segundo, de cada uno de tus amigos, de toda tu familia a la que tanto adorabas y no te cansabas de repetirlo.
Vuela alto Álvaro, ahora nos miras a todos desde arriba, como siempre te había gustado hacer. Eres ángel, tienes estrella, eres aire, eres viento.
Siempre estarás en mi corazón.
VIVIR NO ES SÓLO EXISTIR, SINO EXISTIR Y CREAR, SABER GOZAR Y SUFRIR Y NO DORMIR SIN SOÑAR. DESCANSAR, ES EMPEZAR A MORIR.
Con todo mi cariño
Tu hada madrina,
Carolina